Corría el año 2013 y se inaugura con orgullo de ser la primera en todo el país La clínica veterinaria municipal de Berazategui: ubicada en la calle 149 entre avenida Milazzo y calle 45, Ranelagh. La joya y felicidad del intendente “mascotero” Patricio
Mussi. Quien fue apodado así por la directora
administrativa de la Clínica: Pamela
Dreher al relatar parte de los hechos a destacar en este historia. Cabe señalar que el 19 de octubre, días antes del suceso, desde el
municipio se puso de relieve la labor de la misma, indicando que: “Berazategui
se encuentra a la vanguardia, ya que cuenta con una Clínica Veterinaria
Municipal, dependiente de la Secretaría de Salud Pública e Higiene, que atiende
sin costo alguno a animales domésticos, tengan o no dueño, con la colaboración
de los vecinos, voluntarios y proteccionistas”.
Pero claro, nada podía ser perfecto. La sombra, siempre es más grande
cuando la luz es más intensa. Así es cómo, años después, en una tarde apacible, de un verano
que falta por llegar pero ya comienza a desprender sus calores, genera los
movimientos sanguíneos necesarios, para que el cuerpo quiera actuar siempre en
favor de los placeres mundanos. La soledad, el silencio, el atardecer que ahora
se ralentiza un poco más, porque el sol del 6 de noviembre no es el mismo que en
Julio. El lento cepillar de uno de los animales del predio de Zoonosis, en concreto de una pequeña pony, ponen de manifiesto los deseos fetichistas de la carne.
Cada cual con su gusto siempre y cuando no perjudique al otro. Pero no alcanzó
con la barrera del inconsciente para el empleado Municipal del predio que se
encontraba sólo, ultimando detalles, antes seguramente, de irse a su casa. Su
mente se puso en funcionamiento y dio rienda suelta a sus deseos.
Mientras, una cámara del COM apuntaba al sector silencioso de
caballerizas de Zoonosis. Marcaba en la pantalla de seguridad de la vigilancia
de turno la fecha 6/11/2017 – 17:40
De manera titilante los números seguían su curso. Pero el empleado que
estaba quizás, distraído, viendo otras pantallas, no registró en el
momento la desaparición de “Rodolfo” único nombre por el que se conoció al
perpetrador del acto. “seguramente ya se fue” pensó el empleado que miraba las cámaras,la caballeriza estaba tranquila.
Aún entraba esa luz pacifica del atardecer al recinto. Y la sombras comenzaron
a delatar movimientos extraños, su vista iba de una pantalla a otra hasta que los movimientos fueron lo suficientemente curiosos para fijar la vista sobre el monitor. Sólo, no podía desentrañar la imagen, así que el vigilante llamó a otro de los trabajadores de la empresa para
preguntarle si lo que estaba viendo era verdad.
-
¿Qué ves
vos? - Le preguntó
-
El pony se
puso re nervioso. - Contestó su compañero
-
Si pero me
parece que hay alguien ahí
-
¿A ver? Hacele
zoom
Y un estallido vocal de NOOOOOO y tapándose los ojos, les hizo caer en la
realidad y al trabajo por el cual se les pagaba. Denunciar cualquier hecho
extraño o ilícito.
Mientras, en el patrullero más cercano a la zona. Se les anunciaba por
radio a los policías que debían acudir inmediatamente a la clínica veterinaria,
exactamente a la zona de Zoonosis por posible acto zoofilico.
Los radiocomunicadores viralizan la noticia hasta llegar a los oídos del
periódico “El progreso” que inmediatamente mandan un corresponsal a la zona, que
llega en el mismo momento que el patrullero. Ambos oficiales de la policía, entran
silenciosamente al recinto. Rodolfo con un vigor exultante limpia la
caballeriza, ahora un poco más liviano, quizás silbando mientras barre. Cuando
ve a los oficiales se extraña, cuando le dicen que debe acompañarlos no logra
imaginarse el por qué. Afuera lo espera
una cámara, las esposas y la incertidumbre. Atrás queda la Pony, que según el
diario AlertaProvincia se llama Pamela y estaba siendo rehabilitada por
maltrato.
Al llegar a la comisaría se abrió un sumario interno y luego no pudieron
hacer más que discutir sobre el asunto, pues, no hay una manera exacta de
condena ante un acto sexual con animales.
Entonces el sumario terminan poniéndole la carátula de: “Presuntas
irregularidades denunciadas por la secretaría de Salud en el área de zoonosis”
Llaman al doctor
Carlos Riera, titular de la Fiscalía de Instrucción y Juicio número 5, quien los
deriva con él doctor Pérez que debe presentarse en la comisaría para saber del
asunto y es así que, en un idas y venidas de llamados, Riera dispuso que se labren
actuaciones judiciales caratuladas como: “Averiguación de ilícito” y solicitó la
filmación correspondiente al día entre las 17:50 y las 18:20.
Horas más tarde el
detenido es liberado. Con una causa judicial, según detallaron las autoridades
municipales : "El acusado enfrentará una causa por actos de crueldad animal (Ley
14.346, artículo 3, inciso 7). La zoofilia no está tipificada como delito en el
Código Penal "
Pero claro, para este momento la bola de los noticieros olvida el asunto
y en minutos dan libertad a los más maravillosos disparates. Acusando incluso que la damnificada podría no ser exactamente Pamela sino la yegua que recientemente
el intendente Mussí había regalado a la Ex presidenta Cristina Kirchner. Otros
medios, informaron que había sido exactamente dentro de la Clínica Veterinaria
Para el martes la confusión de los hechos remontaba a lo irrisorio y
el morbo.
La bola de nieve del nombre de Rodolfo se agiganta en menos de 24 horas, pero no así su apellido
La yegua regalada a Cristina Kirchner
Los vecinos de Berazategui, lanzan una campaña, en dónde piden una
fuerte condena judicial al empleado municipal que practicó zoofilia con un pony.
Bajo el título “!Cárcel efectiva para el violador de la pony de zoonosis
Berazategui !” Así ponen en algunos
pasacalles de la zona de Ranelagh y piden una condena "ejemplificadora" hacía
esta pasión que no pudo refrenar el ahora culpable Rodolfo.
Las autoridades municipales desafectaron al empleado en cuestión. Ya no
se puede hacer nada con él. Un caso perdido y ahora despedido de los
establecimientos
En las redes sociales, una ola
irrefrenable de vecinos del conurbano, demostraron su malestar y repudio ante
el accionar del hombre. Y piden que de una vez por todas se vele por los "derechos de los animales”.
Entre los tantos escritos de la
campaña en las redes uno de los indignados reclama (el autor no quiso dar su
nombre):
Copia Textual:
“Debe darse a éste sujeto “Rodolfo” del que no encuentro su apellido,
una condena de cárcel efectiva, y así ejemplificadora, para que se hagan valer
los derechos de los animales. Siendo un agravante ser trabajador de zoonosis, y
no importarle la situación de ésta yegüita en lo más mínimo. Es un VIOLADOR!.
Alguien así de salvaje, como el caso del asesino del perrito chocolate, y
tantos otros, son amenazas para la sociedad en gral. y no pueden ni deben
dejarlo libre.! JUSTICIA!.”
(Nota del autor de esta nota: desconocía el caso del asesino del perrito chocolate hasta ahora)
(Nota del autor de esta nota: desconocía el caso del asesino del perrito chocolate hasta ahora)
Días después, los paños comienzan
a enfriarse y las fuentes judiciales señalan que el hombre “no quedó detenido”
y que probablemente no reciba sanciones graves, debido a que la legislación
estable para estos casos es “penas
menores”.
“El empleado no quedará detenido
incluso si es condenado”, remarcaron sobre la situación del implicado. No
obstante, por alguna razón inexplicable, la Justicia solicitó las imágenes de
las cámaras de seguridad para estudiar el caso a fondo, pero jamás se supo más nada, al menos a nivel medios de comunicación.
La causa quedó en manos del fiscal Carlos Riera bajo la carátula de
“Averiguación de ilícito”.
Podemos pensar sin mucha imaginación que: desde esa tarde la mente de Pamela no haya sido la misma. Que la vista
de los vigilantes de cámara de seguridad tampoco. Que un Rodolfo de incógnito
aún sigue caminando por la calles de Berazategui, seguramente con una
prescripción psiquiátrica para aclarar y apaciguar sus gustos repudiables
para este sistema. Que la ola de vecinos indignados estará siempre a la caza de
un nuevo momento que los entretenga.
Mientras, los archivos empolvados de un vídeo seguirán guardando un acto que fue entibiado por el calor de noviembre. Pero así como en esa cámara fluyeron imágenes de una extrañeza poco frecuente para un ciudadano común, mucho más digno de alguna orgía de mitología griega. También otras imágenes fluirán llamando la atención al borde del ojo de todo aquel que se atreve a ver las pequeñas sombras de la ciudad de Berazategui
Mientras, los archivos empolvados de un vídeo seguirán guardando un acto que fue entibiado por el calor de noviembre. Pero así como en esa cámara fluyeron imágenes de una extrañeza poco frecuente para un ciudadano común, mucho más digno de alguna orgía de mitología griega. También otras imágenes fluirán llamando la atención al borde del ojo de todo aquel que se atreve a ver las pequeñas sombras de la ciudad de Berazategui
La Pequeña Pony: Pamela
